Las mujeres de mediana edad que hicieron una dieta rica en proteínas bajaron más de peso en un año que las que se sometieron a una dieta reducida en proteínas, aseguraron investigadores en Australia.
"No sabemos si esto se debió a la proteína en sí o al hecho de que las mujeres que podían controlar mejor el consumo de calorías elegían alimentos ricos en proteína", dijo a Reuters Health el autor principal del estudio, el doctor Peter M. Clifton, de la Adelaide University.
Independientemente de los niveles de proteína consumidos, Clifton agregó que "hasta pequeñas reducciones del peso estaban relacionadas a los 12 meses con grandes beneficios en cuanto a los lípidos (en el organismo)".
Según el equipo dirigido por Clifton, de CSIRO Human Nutrition, las mujeres que bajaron de peso aumentaron un 20 por ciento su nivel de lipoproteína de alta densidad (HDL) o colesterol "bueno".
Los investigadores evaluaron el efecto a largo plazo de una dieta rica en proteínas sobre la disminución del peso corporal y su mantenimiento en 72 mujeres obesas, sin otras enfermedades, de unos 49 años.
Comenzaron con una dieta intensiva para adelgazar durante 12 semanas y continuaron con una dieta similar durante otras 52 semanas.
Las dos dietas eran ricas en proteínas (el 34 por ciento de las calorías) o ricas en carbohidratos (el 64 por ciento). La grasa aportó el 20 por ciento de calorías en ambas dietas, precisó el equipo en American Journal of Clinical Nutrition.
Tras calcular los niveles de proteína a partir de los registros alimentarios de las participantes durante las 64 semanas de estudio, el equipo halló que las que consumieron la cantidad diaria más alta de proteínas adelgazaron unos 6,5 kilos.
En cambio, las mujeres que ingirieron poca proteína perdieron unos 3,4 kilos.
No obstante, la adherencia a ambas dietas disminuyó en el tiempo.
Por lo tanto, el equipo analizó también los niveles de proteína consumidos, el peso y el nivel de lípidos de todo el grupo. Los investigadores hallaron que la proteína seguía directamente relacionada con el descenso de peso, pero no con una mejoría de los niveles de lípidos en sangre.
Los autores concluyeron que una dieta rica en proteínas ayudaría a bajar de peso, mientras que el mantenimiento mejora la salud, ya sea con una dieta rica en proteínas o en carbohidratos.
fuente: diario.com.mx