domingo, 17 de febrero de 2008

No existen aún dietas mágicas, dice nutrióloga



Someterse a dietas sin vigilancia médica puede ser riesgoso, advierten especialistas. Foto: El Sol de Hidalgo.
ESometerse de un día para otro a una dieta, con el afán de lucir una figura esbelta sin importar qué se tenga que comer o dejar de comer, puede causar graves riesgos a la salud, desde un desequilibrio nutricional, dolor de cabeza, sueño, mareo e incluso alteraciones metabólicas similares a la diabetes o males cardiovasculares.

Actualmente, lucir una figura armoniosa y esbelta ha generado una gran información sobre diferentes dietas que se ofrecen como "seguras", que garantizan la reducción de muchos kilos en poco tiempo y sin originar el famoso rebote o pérdida de energía.

Así lo declaró la nutrióloga Adelaida López, quien advirtió que no hay fórmulas ni dietas mágicas para bajar de peso y no puede hablarse de prescripciones absolutas y generales en la alimentación, debido a que cada persona es diferente y sus requerimientos son distintos.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), se recomienda que la pérdida de peso sea gradual; es decir, medio kilogramo por semana, lo que permite al organismo adaptarse poco a poco al nuevo plan alimenticio, pues al someterse a una dieta de un día para otro y disminuir la cantidad o ingesta de ciertos alimentos puede generar un desequilibrio nutricional.

Según la especialista, cuando alguien desea perder algunos kilos, lo primero que debe hacer es visitar a un nutriólogo a efecto de que éste establezca un control de peso, porque debe evaluarse a la persona, es decir, es necesario conocer cómo se encuentra en cuanto a su masa muscular, masa grasa, hábitos, cuánta energía gasta y con base en esta información el especialista evalúa cuál podría ser la mejor opción para llevar a cabo una dieta.

La nutrióloga Adelaida López recordó a la población que una dieta adecuada es aquella que puede llevarse toda la vida y no aísle a la persona del resto de la gente, pues el objetivo de una dieta, más allá de disminuir peso, debe ser adquirir buenos hábitos alimenticios y prevenir enfermedades de tipo digestivo como colitis o gastritis y enfermedades crónicas como diabetes o hipertensión arterial.

Una dieta equilibrada, debe incluir de 50% a 60% de hidratos de carbono (cereales, en mayor cantidad y azúcares, en menor cantidad), 20% de proteínas (alimentos de origen natural) y 20% de lípidos (saturados, en menor cantidad e insaturados en mayor cantidad).

Otro requisito de una dieta saludable es que sea variada; es decir, consumir con moderación todos los alimentos que integran los diferentes grupos con objeto de evitar desequilibrios nutricionales y caer en rutinas aburridas, así como debe ser adecuada, para que cada persona tome en cuenta factores como edad, antecedentes hereditarios, si ha tenido hijos, estado de salud actual, horarios de trabajo, nivel de actividad física y gustos, entre otros muchos aspectos más.

Una dieta antes que nada debe ser inocua, higiénica y libre de tóxicos que puedan causar algún daño al organismo, destacó la especialista al señalar que cuando las personas sufren ansiedad, antojo o tienen mucha hambre antes de la comida suelen consumir galletitas o chocolates, lo que es un gran error.