jueves, 31 de enero de 2008

Se rompe un mito: Fumar no sirve para bajar de peso; provoca pérdida de masa muscular

Nuevos estudios realizados por la Universidad de South Wales, Sydney, Australia, sobre los efectos de fumar ha concluido que una de las últimas justificaciones que la gente usa para continuar con el hábito - que es que los mantengan delgados.


La profesora Margaret Morris y Ms. Hui Cen, del departamento de Farmacología del Colegio de Ciencias Médicas de la Universidad de South Wales, descubrieron que cualquier pérdida de peso asociado a fumar, es debido a la pérdida de masa magra del cuerpo (músculos y órganos internos) y no a la pérdida de peso.

Realizado en conjunto con la Universidad de Melbourne, los resultados de los estudios fueron publicados recientemente en el American Journal of Physiology: Endocrinology and Metabolism.

El estudio, realizado con ratas, descubrió que a pesar que los ratones afectados con tabaco comieron aproximadamente un 23% menos, sus niveles de grasa no fueron significativamente alterados si ellos hubieran estado consumiendo una dieta alta. Adicionalmente, en todos los animales que fumaron, la grasa fue depositada en su hígado.

Estos estudios indican que aunque fumar reduce el apetito, no ayudan a mantener un cuerpo delgado.

Si los resultados pueden aplicarse a humanos, y esa es la primera advertencia, entonces esta investigación deja en claro que fumando no se bajará de peso.

Fumar no lleva a bajar de peso, y continuar fumando mientras se hace una dieta de alto grado en grasa, es muy poco saludable.

Según indica el médico Jefe del Departamento enfermedades respiratorias y cirugía torácica de Clínica Dávila, doctor Felipe Rivera Chávez, "dentro del perfil de los fumadores existen una multiplicidad de personalidades que hacen posible la mantención del hábito y dentro de éstas se encuentran aquellos que fundamentan el hábito por la mantención del peso; aunque es cierto que la gran mayoría de los que cesan el hábito tienen una ganancia de peso de aproximadamente 2 a 4 kilos, ésta es transitoria si se combina con ejercicios y dieta, y como destaca el estudio realizado en Sydney, Australia, esta aparente mantención de un bajo peso en los fumadores se debe esencialmente por una perdida de la masa muscular y no a una disminución de la grasa. Aunque para los adictos la principal razón para no dejar el tabaco es la dependencia, y en aquellos individuos de baja adicción esta ganancia de peso aparente puede ser una dificultad para que inicien un plan de cese lo que debe contrarrestarse con un buen programa de consejería que incluye medicamentos, dieta y apoyo psicológico", enfatiza el médico.
fuente: lasegunda.com