La especialista en nutrición María del Carmen Ochoa Nieto , afirmó que la obesidad infantil afecta gravemente la salud de los niños, generando problemas cardiovasculares, síndrome metabólico, es decir, la intolerancia a la glucosa, entre otros males.
Baja autoestima, diabetes prematura, males cardiovasculares, colesterol alto y hasta afectaciones al sistema reproductor son algunas de los posibles consecuencias de la obesidad infantil, alertó hoy una experta española en nutrición.
María del Carmen Ochoa Nieto, doctora en Nutrición por la Universidad de Navarra, afirmó en entrevista con Notimex que la obesidad en los niños es causada por los malos hábitos alimenticios, pero en mayor medida por la casi nula actividad física que desarrollan.
Destacó que en España uno de cada cuatro niños presenta sobrepeso y 15 por ciento de la población infantil padece problemas graves de obesidad, por lo que hizo varias recomendaciones para reducir el riesgo de que los niños desarrollen ese mal.
En la actualidad ‘una inmensa cantidad de niños se pasan tardes enteras frente al televisor o en los videojuegos.
Este sedentarismo influye más en su problema de obesidad que la comida que consumen’, argumentó la investigadora. Por ello, consideró Ochoa, los padres de familia deben poner más atención en ese tema y estimular otro tipo de actividades, pues años atrás tanto niños como adultos tenían más movilidad porque no disponían de tantos elementos de confort que ahora reducen el esfuerzo físico.
Aunque admitió que el sobrepeso infantil tiene una base hereditaria considerable de casi el 70 por ciento, aseguró que sí se puede luchar contra él si se gasta energía y se vive en un ambiente sano.
Destacó que los padres de familia cometen muchos errores con sus hijos principalmente en los hábitos alimenticios, pues muchos niños se van a la escuela sin desayunar y se les altera todo el ciclo alimenticio.
‘Los padres con el tren de vida que llevan, no tienen tiempo de estructurar una buena dieta y actividades de ocio al aire libre para sus hijos’, recordó Ochoa.
La nutrióloga explicó la dieta diaria de un niño para ayudarlo en su crecimiento y evitarle problemas de sobrepeso, la cual debe incluir lácteos, frutas, carbohidratos, verduras, carne o pescado, alternando con legumbres y arroz.
Recomendó incrementar el consumo de pescado en la ingesta diaria, ya que los Omega 3, contenidos en la grasa del pescado, benefician al sistema cardiovascular y regulan los niveles de colesterol.
Aseguró, que los dulces deben ser un complemento de la dieta saludable y que éstos deberían ser algo excepcional, pues el exceso de azúcar ocasiona graves trastornos en los niños.
Agregó que los refrescos nunca deben sustituir al agua, pues el azúcar soluble llega directamente a la sangre, lo que deriva en mayores niveles de grasa en el organismo.
La especialista aseguró, que la obesidad infantil afecta gravemente la salud de los niños, generando problemas cardiovasculares, síndrome metabólico, es decir, la intolerancia a la glucosa, entre otros males.
Aseguró que debido a problemas de sobrepeso, cada vez existen más casos en diabetes tipo dos en los niños, ocasionada por la intolerancia al azúcar por serias afectaciones en el páncreas.
Añadió, que la obesidad infantil, puede afectar el desarrollo sexual y reproductor de los niños, pues la grasa enmascara las hormonas sexuales, atrofiando el desarrollo puberal.
Se refirió al fenómeno conocido como ‘rebote adiposo’, que ocurre en los niños entre los 5 y los 7 años y en el que, debido a un cambio de metabolismo, se genera una acumulación de grasa en el cuerpo.
‘Cuando este fenómeno ocurre antes, por ejemplo en niños de tres o cuatro años, es probable que nos encontremos ante un eventual problema de obesidad infantil’, agregó Ochoa.
Advirtió que el tratamiento de niños con problemas de obesidad implica a toda la familia. ‘Lo más importante es la formación de hábitos, que deben permanecer para toda la vida’, concluyó.
fuente: milenio.com